Ni al guionista más retorcido se le ocurriría escribir que Sergio Ramos tendrá una escuela con su nombre. Una vez más, la realidad supera a la ficción. Es el claro ejemplo de cómo funciona el sistema educativo y de lo que quiere el Real Madrid para el futuro: jugadores como Pepe y como el de Camas.
El Real Madrid ha firmado un convenio con la Fundación Amparo Rubiales para construir una escuela socio-deportiva en Camas, tierra natal de Ramos, que llevará el nombre del defensa madridista.
Precisamente Sergio Ramos no es el mejor ejemplo para educar a los niños ni a nivel cultural ni a nivel deportivo. Ramos, el mismo que escribió 'Arriba España' en su perfil de Twitter, que dijo que en la selección de Lituania había jugadores internacionales, que aseguró que algunos de sus amigos jugaban al basquet y otros lo hacían al baloncesto y el que celebró la suma de tres puntos en una eliminatoria de Champions en la que lo único que contaba eran los goles, no es el ejemplo a seguir.
A nivel deportivo, su teatro, sus malas artes, su chulería y su juego duro, incluso violento en ocasiones y rozando la legalidad, tampoco son lo mejor para los niños. Pero este es el futuro de España y el futuro del Real Madrid.
El alcalde de Camas, Rafael Alonso, desveló en el acto de presentación de este proyecto que "para cualquier niño" de ese territorio "será un honor practicar deporte en una escuela del Real Madrid que lleve el nombre de Sergio Ramos". Un colegio que acogerá a 150 niños y niñas... 150 futuros Pepe o Sergio Ramos. Vamos, lo que necesita España para salir adelante.
